«El sector no tiene capacidad de absorber el impacto de los aumentos porque trabaja con un margen de ganancia dentro 4 y 8 por ciento», aseveró Hernán Sánchez.
La devaluación de más de 100% que decidió el gobierno sobre el dólar oficial y la suba de los combustibles impactarán en los costos logísticos que, a su vez, tienen incidencia en el transporte de productos básicos.
La decisión del ministro de Economía, Luis Caputo, de llevar el dólar oficial a 800 pesos de piso fue la primera de una serie de medidas que influyen en la cadena productiva. A eso, se sumó ayer el incremento de entre 35 y 40 por ciento de los combustibles.
«El sector no tiene capacidad de absorber el impacto de los aumentos porque trabaja con un margen de ganancia dentro 4 y 8 por ciento», señaló Hernán Sánchez presidente de la Cámara Empresaria de Operadores Logísticos (Cedol). Y remarcó que como el costo se trasladará «100%» al importe del traslado de mercaderías, podría haber un incremento de un 20% de piso en lo que se cobra, con un diferencial entre corta, media y larga distancia.
Para el directivo de Cedol, el anuncio de Caputo estaba «en la banda superior de las expectativas en cuanto al nuevo tipo de cambio, pero en la banda inferior de lo que esperábamos en cuanto a la fecha en que se iba a producir».
Según explicó Sánchez, sólo la devaluación tiene un impacto en varios rubros vinculados con la logística, como la reposición de neumáticos, lubricantes, repuestos, recambio de unidades; y con la inflación, como los alquileres de depósitos, además de la suba de los combustibles que comenzó a operar entre miércoles y jueves.
Para el presidente de CEDOL, una complicación adicional podría producirse en caso de que se produzca una reducción de la actividad económica y del consumo, que ralentizará la dinámica de transporte de artículos. «Si baja el volumen, tendremos que realizar una administración responsable para readecuar los costos y analizar que no impacte en las fuentes de trabajo».
En tanto, la empresaria de transporte y especialista en comercio exterior, Delia Flores, planteó que «lo único hasta ahora concreto, es el aumento del gasoil. Luego, en el transcurso de los días, iremos viendo los demás componentes del costo logístico, el comportamiento que tienen, por ejemplo, neumáticos. Todavía es muy pronto para poder determinar».
De todos modos, marcó como elementos a tener en cuenta que «como veníamos, era prácticamente inviable importar y los pocos que podían hacerlo era con ´extra costos´ de todo tipo, además en muchos casos quedar ´debiendo´ a sus proveedores del exterior. En otros casos, los importadores han venido pagando sus importaciones con sus dólares de ahorro, es decir al dólar billete. Entonces, la realidad es que esos productos importados ya tenían costos al dólar paralelo».
Para Flores, «están eliminando muchos procesos administrativos que antes solo generaban costos, demoras y trabas. Y el resultado era nefasto para la economía, la producción, para el empresario que quería trabajar y producir».
*Nota publicada en Bae Negocios el pasado 14 de diciembre.
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