“Somos los principales generadores de ahorros en la cadena de suministro”

Con una marcada cultura del trabajo como herencia familiar, Alejandro Spadone comenzó su recorrido laboral a los 16 años. Desde entonces pasó por la industria de los medios, en La Razón; el consumo masivo, en Bodega San Huberto; el Entretenimiento, con la empresa de Eventos y Marketing Deportivo Pro Enter; el sector maderero, con Maderas Patagónicas; hasta, finalmente, su arribo a la logística, actividad en la que se encuentra hace 12 años y donde desarrolló ampliamente su carrera. 

Ahora, con 42 años es el director de TP Logística, cargo desde el cual participa en la gestión diaria de la compañía a partir de una gran orientación comercial y operativa. Además, con una formación académica basada en la Administración de Empresas y una especialización en Logística, también forma parte de la comisión directiva de CEDOL, en donde confía seguir sumando conocimiento y aportando valor al sector. “Mi objetivo es el desarrollo de las empresas como una herramienta para el crecimiento, con una visión a largo plazo en la que las organizaciones trasciendan por sobre las personas y podamos colocar siempre los recursos a disposición de nuestros clientes”, sostuvo Alejandro en el comienzo de la entrevista.

“Nuestra actividad es una herramienta esencial para generar soluciones y un mejor desarrollo de los negocios, por eso debe ser desempeñada con mucho profesionalismo y capacidad para que los resultados sean productivos y eficientes”, explicó respecto de su visión de la logística. Y agregó: “Es fundamental su desarrollo para generar progreso y crecimiento pero también desde donde hace años pretendo aportar trabajo e innovación”.

-¿Cómo describiría la actualidad del sector logístico argentino?

-El sector se encuentra en uno de los momentos de mayor exposición y crecimiento. La tarea que podemos desarrollar las empresas de logística es clave, aportando soluciones y, especialmente, para los negocios del futuro que ya son una realidad. En nuestro país, la logística está tomando un protagonismo muy importante, acelerado por la pandemia, pero sobre todo a partir del crecimiento profesional de los operadores logísticos locales que hemos incorporado tecnología y conocimiento. Por supuesto, aún queda mucho para seguir desarrollando, pero estamos en el buen camino y con la firme intención de invertir en el sector y en el país.

-¿Cuál es el nivel de los operadores logísticos argentinos?

-Hablamos de algo superior, donde los estándares internacionales se cumplen gracias a un altísimo grado de profesionalidad en el sector y la voluntad de los operadores de ir por ese camino. No obstante, lo más importante es que el sector está cada vez más competitivo, mejorando la calidad del servicio y generando a su vez mayor competencia de precios. De esa manera, crecemos en conjunto y no como desarrollos individuales.

-¿Tan buenos son los profesionales y recursos humanos del sector? 

-Hay una alta calidad y la formación logística es cada vez más interesante para los profesionales que se desarrollan en el sector. La nueva generación de logistas aporta mucho conocimiento en una etapa clave de crecimiento para nuestra actividad. La posibilidad de contar con recursos formados en la especialización hace que el sector siga creciendo en calidad. Por supuesto, hay que seguir trabajando en el desarrollo de las nuevas capacidades y oportunidades para los niveles operativos más básicos, a través de más capacitación y con oportunidades de crecimiento personal. Es decir, somos parte de una industria que generará muchas oportunidades en el mundo laboral del futuro y, para ello, el conocimiento y la utilización de la tecnología serán clave.

-¿Cómo es su visión estratégica de la logística como negocio?

-Es en base al desarrollo de la tecnología, ese es el futuro del negocio. Con tecnología se desarrollarán más y mejores soluciones. En la actualidad, en tanto, el negocio también se apoya en la integralidad de las operaciones, más allá de algunos operadores especializados en servicios puntuales. Sin embargo, reitero, el futuro se verá potenciado por la integralidad de la información, clave para lograr la inmediatez en la toma de decisiones y productividad.

-¿Hay un área dentro de la logística en la actualidad que destaque por sobre el resto o sea clave en ese futuro del que hablamos?

-Una vez más debo mencionar a la tecnología porque esa la clave actual y la llave para el futuro de la actividad logística. Todo lo que se pueda aplicar de tecnología en la logística es mejora en eficiencia, productividad, inmediatez e información. 

-¿Y la logística argentina es tan cara como sostienen desde ciertos sectores?

La logística se podría considerar cara si fuera improductiva o ineficiente, si no se hiciera de manera profesional o con los recursos inadecuados, como todo negocio. En ese sentido, en Argentina hay muchos operadores muy eficientes, que prestan servicios y soluciones de calidad muy ventajosas para los clientes que, a su vez, obtienen grandes ahorros. Por eso cada vez más empresas deciden tercerizar sus servicios con operadores locales. Es una falacia que la logística argentina sea cara y le quieran cargar a los operadores ese mote.

Es más, para terminar con ese mito, podrían observar el porcentaje que implica la logística sobre el total de un producto y verían que son valores lógicos y comparables con cualquier lugar del mundo. Y eso se logra principalmente porque el operador desarrolla una solución a medida del cliente y su producto, optimizando recursos y haciendo sinergia con todas las actividades.

-Entonces, ¿por qué cree que pasa esto?

-Tiene que ver con el problema de la Argentina, donde las empresas viven con una altísima presión impositiva y una carga salarial importante. Esos son problemas estructurales donde, sin dudas, hace falta una reforma global para mejorar las condiciones y que se vea reflejado en el costo final de toda la cadena. 

Por otro lado, es necesario un plan de desarrollo de infraestructura en el país donde se pueda ser competitivo en la oferta de servicios, mejorando rutas, recuperando el sistema ferroviario y pensando a largo plazo en la oportunidad de desarrollo y financiación para el sector.

-Por lo tanto, ¿qué reflexión hace cuando hablan de la logística como culpable de la suba de precios en los productos?

-La logística tiene los mismos problemas que el resto de las empresas del país. Con la inflación actual es imposible sostener los costos, más aún cuando el costo laboral representa en los costos totales de los operadores más del 60%. La logística es un negocio de márgenes chicos, donde la eficiencia es clave para ser rentables.

Insisto, los operadores somos eficientes, agrupamos recursos y operaciones para lograr costos que sostengan una operación viable para un producto en particular. La logística siempre se adapta al producto y la necesidad del mercado en el que se desarrolla; por ello, sobre todo, no terminamos siendo los formadores de precios sino todo lo contrario: somos los principales generadores de ahorros en la cadena de suministro.

-¿Cuáles son los principales problemas que afronta el sector? 

Cómo lo han sido históricamente, lo son en la actualidad: inflación, presión impositiva y carga laboral. Esos, junto con la informalidad y una falta de cultura del trabajo cada vez más enquistada. Además, la imposibilidad de desarrollar negocios a largo plazo por falta de reglas constantes y financiación, también son problemas estructurales. Es el gran desafío del sector, trabajar en soluciones a todas estas problemáticas.

-Si pudiera armar un Plan Logístico Nacional a 15 años o más, ¿cuáles serían los primeros puntos que definiría como esenciales?

-En primer lugar, desarrollar un plan de inversión en infraestructura a nivel país para ofrecer alternativas competitivas que mejoren los costos, eliminando costos extra por falta de opciones.

Luego, sería esencial generar una mesa de trabajo para buscar mejores condiciones generales para todas las partes, con crecimiento y desarrollo de oportunidades.

En tercer lugar, alcanzar mejores condiciones para que los operadores argentinos sigan invirtiendo y, especialmente, puedan hacerlo en tecnología. La logística argentina puede ser muy competitiva en el mundo por su capacidad profesional y de trabajo en la gestión de calidad, pero debemos poder contar con el apoyo interno para que eso suceda.

-Para 2050, la logística argentina…

-Será un servicio esencial de altísima calidad, con mucha capacidad de desarrollar soluciones eficientes, basado en la tecnología como pilar principal, compitiendo en eficiencia con el resto del mundo.